MICRORRELATOS
Angeles Arenas
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LA LLUVIA.- Llovía en la calle y le llovía en el alma.
Fuera, un cielo gris y una cortina de agua. Dentro, nubes negras de recuerdos tristes. De pronto el cielo se rasgó con un hermoso arco iris. Abrió la ventana para verlo, aspiró el aroma a tierra mojada y recobró las ganas de vivir.
JUAN.- Era un hombre bueno, pero ignorante. Como no sabía rezar, todas las ma-ñanas, al levantarse, decía solamente: “Señor, aquí está Juan”.
Cuando llamó a las puertas del cielo diciendo “Señor, aquí está Juan” Dios le respondió: “Pasa, Juan, te estábamos esperando. Durante todos estos años, cada mañana, hemos recogido tu oración”.
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Gaspar Pérez Albert |
Vegetariano.- Se consideraba vegetariano porque solo comía carne de animales, siempre que éstos hubieran sido alimentados únicamente por vegetales.
Extraño corredor.- Un extraño corredor de fondo solía quedarse el último y se excusaba diciendo que así se sentía más seguro porque sabía que no le perseguía nadie.
Noble bruto.- Algunos historiadores, al relatar la vida y hazañas de un caballero, tan noble como vulgar y bruto, le solían comparar con su caballo.
Pérdida de tiempo.- Aquel matrimonio, de noble linaje, perdió su tiempo cuando al bautizar a su primogénito le impusieron los nombres de Jorge, Luis, Carlos, Toribio de la Encarnación y de todos los Santos, pues al poco de nacer, ya todo su entorno le llamaba con el original nombre de “Chucho”.
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Francisco L. Navarro Albert |
Experiencia.- Cuando se es joven se desea alcanzar la madurez para tener experiencia; cuando se alcanza la madurez desearíamos no haber tenido más de una experiencia.
Dios.- Dios creó al hombre para que poblara la Tierra y fuese feliz; el hombre creó a Dios para tener un pretexto con el que justificar sus actuaciones.
El espejo.- Si el espejo te devuelve un rostro amargado no le eche la culpa a la vida; la cara es tuya.
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