Índice de Documentos > Boletines > Boletín Diciembre 2012/Enero 2013
 
 
______________________________ MICRORRELATOS



 

Maria Terese Ibáñez

LOTERIA: Contaba mi madre que mi abuelo Francisco, al que no tuve la suerte de conocer, no jugaba nunca a la lotería. Decía que era casi imposible que le tocara y lo explicaba así: Imaginaros un corral muy grande lleno de ovejas blancas. Entre todas hay una negra. Desde fuera, por encima de la tapia se tira una piedra. Es casi imposible que la piedra vaya a darle a la oveja negra.
 

PREMIO: El mejor premio de reconocimiento me lo doy a mí misma cuando sé que lo que he hecho ha sido con la mejor intención y de la forma mejor que he sabido.
 

SOLEDAD: El crepúsculo era de color rosa y violeta y esos mismos colores se los prestaba el mar. Había una paz, una bonanza que envolvía a la tarde y llegaba al alma. Recordaba otra tarde como aquélla en la que paseaba cogida de la mano de su esposo. La tarde era igual, pero qué distinto todo para ella. Ahora se sentía triste, caminaba hacia su casa vacía y sabía que nadie saldría a su encuentro para darle un abrazo de bienvenida.


Francisco L. Navarro Albert

LA LEY.-El hombre ha creado la Ley para cerrar la puerta a la Libertad.
 

AMAPOLA.-La amapola eres tú, cuando te sonrojas.
 

EL OCASO.- El ocaso es el rubor del Sol ante la mirada amorosa de la Luna.
 

NAVIDAD.- La Navidad es el pretexto en el que apoyamos las buenas acciones que no hemos sido capaces de llevar a cabo  el resto del año.
 

BOSQUE.-Los árboles están en el bosque porque no se resignan a vivir lejos de sus padres.

Gaspar Pérez Albert

OÍR O ESCUCHAR: Aquel orador se sentía satisfecho porque su discurso lo oyeron muchísimas personas. Lástima que solo unas pocas lo escucharan.

  

AFILADOR PÍCARO: Un pícaro afilador vio mermados sus beneficios por culpa del bulo de que su presencia auguraba días de viento y frío. Entonces amplió su oferta vendiendo también abrigos y mantas.

 

CUESTIÓN DE AVARICIA: Un comerciante avispado pretendió comprar su vino a un agricultor, con pago aplazado. El labrador no aceptó, porque, si aceptaba, durante un cierto tiempo no tendría vino ni dinero. Y, según decía, como no era avaricioso, pretendía poseer solo una de ambas cosas.

 

DIÁLOGOS PARA BESUGOS: Sabía que los peces no hablan. Sin embargo, su dialéctica confusa y su escasa capacidad dialogante hacían que los suyos fueran siempre “diálogos para besugos”.

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