Yo no sé si es por temor,
mas cuando escribir intento,
siento un miedo aterrador.
Y por mucho que lo intente,
no alumbro ninguna idea
en mi bloqueada mente.
El carecer de experiencia
puede ser, mas es, seguro,
por falta de inteligencia.
Cuando lo quiero intentar,
me siento tan inseguro,
que hasta me pongo a temblar.
Me preocupa mi impotencia,
me pongo a reflexionar
y me armo de paciencia.
Estoy así un largo rato
y no consigo empezar.
Casi estoy desesperado.
|
Poco a poco van cesando
mis miedos y mis temblores
y así me voy animando.
Dejo así pasar el tiempo
y al final ciertas palabras
de mi mente van fluyendo.
Suelen ser palabras sueltas
difíciles de entender,
raras, vagas e inconcretas.
Con lentitud van saliendo
y, poco a poco, se van
en legibles convirtiendo.
Pronto empiezan a juntarse
y, aunque con dificultad,
acaban formando frases.
Y, ciertamente, me anima
ver como forman estrofas,
aunque carezcan de rima.
|
Y a base de mi insistencia
van convirtiéndose en versos,
que al final su rima encuentran.
Y al fin, casi sin pensarlo,
me está saliendo un poema,
que casi ya he terminado.
Y ahora que bien lo pienso,
no eran ciertos mis temores
y más que infundado el miedo.
Y hoy me siento muy feliz,
pues, casi sin pretenderlo,
ya soy capaz de escribir.
|