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- EL MAREMOTO DE 1869
 
Mi compañero y mejor amigo Ricardo Montes Bemárdez, Cronista de Las Torres de Cotillas, eminente historiador, que por cierto fue Catedrático de nuestro Instituto Ruiz de Alda de San Javier, en su reciente obra “El origen de Los Alcázares - Sus fiestas 1850-1927”, en la página 15 escribe lo siguiente: “Pocos años después, un maremoto que elevó las aguas de 6 a 8 metros, sobrepasando por completo La Manga, se introdujo tierra adentro en Los Alcázares hasta alcanzar mas de 400 metros y devastó todo el lugar.

El desastre afectó especialmente desde Cabo de Palos a Torrevieja, destruyendo 35 barcos y numerosas embarcaciones pequeñas de pescadores.
La Encañizada y 50 barcos desaparecieron en el Mar Menor, al igual que muchas casas y el cuartel de los carabineros. El desastre se produjo los días 30 y 31 de octubre y 1 de noviembre de 1869”.
Contacto telefónicamente con el autor y me dice que el maremoto no afectó ni a La Ribera -aún no se llamaba Santiago de La Ribera-, ni a Los Alcázares, por cuanto en aquellas fechas no existía edificación en ninguna de las dos poblaciones, pues según “La Paz” de Murcia de 24-8-1866: “En este año sólo existía una casa conocida como Caseta de Hortelano”.
Según el Nomenclator de la Provincia de Murcia, Roda era entonces una aldea de 60 casas, quizá alguna de ellas estuviera en los Alcázares, ya que en aquella época pertenecía a la pedanía de Roda . En El Rami, situado en su opuesto geográfico, se contaban tres casas, mientras que en Hoya Morena había 43 viviendas.
Donde sí causó grandes daños fue en Cabo de Palos, donde alcanzó al torrero del faro, y también en Torrevieja.

Desde siempre he sido partidario de la apertura de La Manga por su zona Norte, y el Ayuntamiento de San Javier siempre ha defendido ésta salida, tanto por lo que acercaría la capitalidad del municipio a sus límites en La Manga, como por la agilidad que daría a la entrada y salida de vehículos.
No quiero ser agorero, pero pienso qué sucedería si alguna vez, por desgracia, ocurriera un desastre parecido y hubiera necesidad de evacuar o prestar auxilio a los miles de personas que allí se acumulan hoy en día, sobre todo en verano.

Actualmente solo podríamos hacerlo con embarcaciones, pues únicamente por carretera resultaría imposible y, por si fuera poco, algo que paliaría el problema, como es la construcción de Puerto Mayor abierto al Mediterráneo, nos empeñamos en poner toda clase de pegas para que pueda ser una realidad, tan importante como necesaria.

 

 

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