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DOS AÑOS SIN ASILO y... ¿por qué?

(por Fernando García Cabrera)


     El pasado año 2009, nos despertamos con la aparición en la prensa de una noticia por la que se nos informaba que el Asilo de Orihuela era cerrado, por dos motivos: 1.- Por falta de vocaciones religiosas y 2.- Por cuestión económica.

     El primer motivo indicado es al día de hoy relativamente comprensible. Estamos ante una sociedad irreligiosa -que no laicista-, si no ahí tenemos los bautizos, con asistencia de muchísimo público; las Primeras Comuniones, con asistencia de muchísima más gente que cabe en los templos y tienen que estar fuera de ellos, por lo que no pueden asistir al acto religioso, no así a la comida o almuerzo posterior y toda la parafernalia que acompaña estos actos sociales: desplazamientos en limusina de la actora del acto (la niña que va a recibir por primera vez el Cuerpo y la Sangre de Cristo), etc.; continuamos con las confirmaciones masivas -cada vez en mayor número- y, sin embargo algo falla que los matrimonios eclesiásticos han disminuido, los seminarios cada vez más vacíos… (que cada cual saque sus propias conclusiones si les apetece).

     El segundo motivo, no me cuadra: ¿falta de información? Y no me cuadra porque el Asilo recibe ayuda económica: de los asilados, de la Comunidad Autónoma -económica y de personal técnico, etc.-, con la declaración de bien cultural del edificio con las ayudas económicas que de ello se derivan, etc., por lo que tampoco al que suscribe le cuadran las cuentas salvo como he indicado al principio de este apartado la falta de información; todo ello me ha llevado desde hace ya algunos meses a investigar sobre el Asilo: de quién fue la idea de su implantación, cómo y dónde nació, las primeras ayudas económicas y de toda índole, pero esto se me haría muy extenso y todos nos perderíamos en un abismo sin llegar con ello a conclusiones que pudiesen ser positivas y no negativas o destructivas, para ello ya se dedican otros… porque, en vez de remitir asilados de Orihuela  a  otros  destinos,  ¿no se puede efectuar la misma acción a la inversa? Ahí queda la pregunta.

     Fue en el año 1882, cuando tomó posesión de la Diócesis de Orihuela, el Dr. D. Victoriano Guisáosla. Así lo proclamaba “EL SEMANARIO CATÓLICO” de Alicante el día 1º de Julio de 1882, nº 604, Año XIII, en su portada y en la página 370 del mismo semanario.

     Desde su llegada a Orihuela, abrigó el caritativo deseo de establecer en ella un asilo para pobres y ancianos, a cargo de religiosas. (Así leemos en el libro titulado “Un Obispado Español: el de Orihuela-Alicante”) “Don José Roca, diputado provincial, y conocedor de los deseos del Prelado, quiso compartirlos y, al efecto, cedióle dos casas propias en la calle de Meca. El señor Guisáosla, inmediatamente, dispuso se verificasen en ellas las obras necesarias para acomodarlas a su nuevo destino, y dotó al asilo del menaje y ropas indispensables para su instalación. El día 12 de Mayo de 1883 llegaron las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, a cuyo cuidado se confió el asilo. Con asistencia del Prelado y demás autoridades eclesiásticas y civiles, cantóse un TE DEUM en la iglesia parroquial de Santas Justa y Rufina, para celebrar el acontecimiento caritativo -cuestión esta que no he podido contactar por no haber podido examinar el Boletín Oficial del Obispado de Orihuela- V. 1883, pág. 95, por no haber recibido autorización para ello tras mucho tiempo de haberlo solicitado- (…) construida a expensas del referido Prelado.

     “El miércoles debieron llegar a Orihuela la Madre Superiora de las Hermanitas de los pobres ancianos desamparados, y siete más de estas, con objeto de fundar en aquella ciudad una casa de este benéfico y caritativo instituto. Según anuncia La Voz de Orihuela se trataba de hacerles solemne recibimiento.” (El Semanario Católico, de Alicante, 12 de Mayo de 1883, nº 649, Año XIV.)

     Este es el primer punto que resalté: Falta de vocaciones religiosas.

     Examinamos el Padrón Municipal al 1º de Diciembre de 1930, existente en la Biblioteca antes mencionada, de él se desprenden los siguientes datos: Número de religiosas que asistían al asilo: 12: 4 de Valencia (Bellreguart, Oliva, Játiva y Sueca), 3 de Alicante (Pedreguer, Beniarrés y Cocentaina), 1 de Oviedo, 1 de Murcia (Yecla), 1 de Lérida y 2 de Almería, de 54, 81, 64, 54 (3), 72, 36, 34, 69, 52 y 39 años de edad, respectivamente, asistiendo a 49 asilados (22 varones y 27 hembras), de ellos 5 casados, 28 viudos y 16 solteros.

     En el Ayuntamiento solamente existen 2 Padrones de Habitantes: los referentes al 1 de Marzo de 1981 y al 1 de Abril de 1986. De estos Padrones he extraído y trabajado, de momento, los siguientes datos:

1.- 1981: Empadronadas 14 religiosas y 192 asilados: 97 hembras y 95 varones.
2.- 1986: Empadronadas 22 religiosas y 192 asilados: 94 hembras y 98 varones.

De los datos facilitados y expuestos en el presente artículo nos podemos preguntar: ¿Faltan religiosas y/o vocaciones? ¿Faltan medios económicos hasta llegar al cierre del Centro Social?

     Las Hermanitas de los Ancianos Desamparados dicen: NUESTRO TESORO/ VOCACIÓN Y, A ESTE TÍTULO INDICAN: Las Hermanitas de los Ancianos Desamparados hemos descubierto en lo más íntimo de nuestro corazón el amor personal de Jesús y nos hemos sentido movidas a dejarlo todo por Él.(…) “El Corazón de Jesús arde en llamas de purísimo amor. Con este amor purísimo es necesario que tratemos siempre a nuestros ancianos, interesándonos muchísimo de su bienestar temporal y eterno” (Santa Teresa de Jesús Jornet).

     Dejémonos de dedicar el local o Centro Social a otras actividades. Que sean las Hermanitas las que lo administren o sean seglares competentes los que continúen la obra que en su día nuestro Obispo Guisáosla y sus continuadores quisieron que fuera: un Asilo de Ancianos Desamparados. Con destino a ellos se creó, se cedieron propiedades y nosotros ahora, cerramos y abandonamos.

     Así nos va: El Palacio episcopal, en museo. La Universidad Histórica de Orihuela, en Alicante. La Guardia Civil, ausente, el Seminario en Alicante y el Menor lo quieren convertir en otra cosa… ¿Es ésta la Gran Ciudad de Orihuela?

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