Índice de Documentos > Boletines > Boletín Febrero/Marzo 2012
 

        EL LEGADO 18        
(por Toni Gil)


     El diario Información de Alicante publicaba el pasado 2 de octubre una doble página dedicada al Centro de Legados CAM, citando 17 donaciones que constituyen su fondo. Figueras Pacheco, Azorín, Julio Capilla, Jorge Juan, Guillén Tato, Arniches, Rodolfo Llopis, Familia Portes, Germán Bernácer, Eusebio Sempere, Mas Porcel, Emilio Varela, Oscar Esplá, Gabriel Miró, González Pomata, Juan de Dios Aguilar, la Casa Modernista… las referencias epatarían cualquier propuesta por envidiable que pudiera ser considerada.

     Pero la periodista olvidó –aunque cómo la conozco y sé lo profesional que es, en realidad creo que no se lo citaron sus fuentes- que no son diecisiete, sino dieciocho los legados merecedores de ser conservados.

     Siendo importante –e inigualable- cualquiera de los enumerados, no es menos cierto que el propio “autolegado” también hay que considerarlo como un acervo de singular trascendencia. Libros contables y de actas, impresos, resguardos de depósitos, memorias, libretas, huchas, elementos publicitarios, revistas, material gráfico y audiovisual… más de 10.000 catalogados y unos 60.000 por catalogar, de treinta entidades financieras que han devenido en lo que hoy es Caja o Banco CAM, de las cuales casi la mitad tienen raíces alicantinas. Y este proyecto –iniciativa del que fuera alto directivo Jorge Abad- está, en estos momentos, suspendido sine die.

     Y un riesgo. A mitad de febrero, cuando esto escribo, no se sabe cómo ni dónde se va a conservar este “legado” mientras la Obra Social CAM –donde estaba inserto presupuestaria y formalmente el  archivo histórico- se ha desentendido del asunto. Así, si nadie lo impide, se corre el peligro de no valorar este material adecuadamente y dejarlo perecer indefinidamente.

     No es la primera vez que ha ocurrido.

toni.gil@ono.com


Nota de JUBICAM

Nos sorprende la noticia y nos preocupa el destino de este legado histórico con el que nos sentimos identificados como jubilados de CAM.

Desde Jubicam nos ponemos a disposición de sus custodios para, si lo consideran oportuno, ayudar a su conservación.

Volver