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Estimados lectores, siguiendo en la recién inaugurada línea biográfica sobre nuestros fundadores, conoceremos hoy una sucinta historia sobre el inspirador del nacimiento de la Caja Rural de Ahorros y Préstamos de Alhama de Murcia el 18 de julio de 1902, institución benéfica promovida por D. Francisco Rivas Moreno.
Nuestros ya nutridos fondos documentales del archivo histórico cuentan desde hace unos días con lo que en su tiempo fue un modelo de carta personalizable, demandando colaboración ciudadana para la “cosecha” de capital con el objeto de poner en marcha una Caja Rural en la ciudad murciana de Alhama, posiblemente el primer ejemplo de mailing de nuestra historia.
Transcripción del documento original:
CAJA RURAL DE AHORROS Y PRÉSTAMOS DE ALHAMA DE MURCIA
Sr. D. .................................................................
Muy Señor nuestro: De todos es conocida la estrechez en que vive el pequeño agricultor y los estragos que en él hace la usura, pues necesitando á veces fondos para las ineludible operaciones agrícolas, se vé forzado a admitir y consentir las condiciones que se le imponen por muy onerosas que sean.
Esta estrechéz hace que tampoco pueda disponer de buenas semillas y abonos que fertilicen las tierras y por consiguiente aumenten sus cosechas. También es de sobra conocida la vida del jornalero, que si bien una parte del año, puede atender con relativo desahogo a las necesidades de su familia, en los años escasos y sobre todo en el largo periodo del Invierno, se vén privados del jornal, único sustento de esta numerosa clase, haciéndose sentir los horrores de la miseria y el hambre.
Todas estas consideraciones han hecho que, secundando las felices iniciativas del incansable Apóstol de las Cajas Rurales de Ahorros y Préstamos, D. Francisco Rivas Moreno, se haya constituido una en esta Villa, que empezó a funcionar el 1º de Agosto próximo pasado, siendo su obgeto principal el promover la afición al ahorro y el poder hacer préstamos a los pequeños agricultores con un interés módico arrancándoles de las garras de la usura.
Un núcleo de personas filantrópicas, ha adelantado los primeros fondos para su constitución, pero para que la marcha de la Sociedad, responda á sus nobles fines, es conveniente la cooperación de todas las personas que como V. tienen acreditados sus nobles sentimientos a favor de las clases trabajadoras, reuniendo además la circunstancia de tener Colonos en este término Municipal a quien puede serles util esta Caja Rural.
En este concepto, la junta que á continuación se indica, tiene el honor de ofrecerse a V. y rogarle contribuya consu cooperación á tan laudable fin por lo que le manifiesta su más profundo reconocimiento.
JUNTA ADMINISTRATIVA.-
Presidente.- D. Vicente Vidal-Abersa Salazar
Vicepresidente.-D. Juan Amato Rodriguez Moliuero
Tesorero.- D. Manuel García Díaz
Secretario.- D. Pedro Cánovas Vidal
Vocales.-D. Fdereico Ibernon Carrasco, D. Lázaro García Díaz, D. Francisco Angosto Lapizburú, D. Jerónimo Javaloy Sanchez, D. Pablo Aledo Caja, D. Salvador López Cerón y D. José María Andreo Sevilla.
El denominado en varias fuentes “apóstol del ahorro”, nació en Ciudad Real y destacó por ser un librepensador y un gran divulgador. Licenciado en Derecho, pronto se consagró como un gran periodista y político. Su incursión en la política comenzó en 1877, cuando fue elegido diputado provincial. Asimismo, fue presidente de la Diputación provincial de Ciudad Real en 1890.
Escribió 29 obras divulgativas y varios folletos sobre economía práctica que publicó en la llamada ´Biblioteca de la Cooperación´, una colección creada por la Librería Agrícola de Madrid, dirigida por su padre F. Rivas Grande. En dichas obras Rivas mostraba qué y cómo hacer para fundar cooperativas de consumo y de producción (bodegas, destilerías, lecherías, queserías, panaderías, carnicerías), cajas rurales, bancos populares y sindicatos agrícolas. Analizó el movimiento cooperativista en Rusia, Huelva y los Balcanes, y estudió el latifundismo, el ahorro en España, las leyes agrícolas, el paro forzoso en La Mancha, las ligas de compradores y los medios para combatir las plagas de langosta. Llegó a fundar y dirigir publicaciones como El Labriego, El Contribuyente, La Reforma Arancelaria, El Progreso Agrícola y Pecuario, y la Asociación Agrícola.
Fue miembro del Consejo Superior de Agricultura, e inspirador también de la Caja Regional Murciano-Albacetense de Previsión Social y Monte de Piedad de Murcia en 1922.
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