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AUTOCONTROL

(por Fernando García Cabrera)

   

     En el del pasado mes de Marzo, apareció un artículo titulado “CRISIS” examinando un aspecto de la misma.

     Hemos recibido el correspondiente al mes de Abril y habrán podido observar la publicación de dos artículos casi con el mismo título que el del mes anterior; habiendo intentado sus autores expresar diversos puntos de vista de la tan manida crisis. De todos ellos puede sacar cada uno sus propias conclusiones y hasta donde nos puede llevar la misma, se le llame como se le quiera llamar. Mi exposición fue mostrar una visión de la crisis tributaria y compararla con las existentes en los primeros libros de la Biblia  (que en estos momentos nos viene bien pues algunos han recibido ya su correspondiente borrador para efectuar la declaración anual sobre la Renta de las Personas Físicas).

     Con estos artículos, si no aparecen otros más, vemos que a todos nos afecta y podríamos decir:

1.- Que la “crisis” la notamos y tenemos cercana y latente.

2.- La diversidad de aspectos a tener en cuenta para entender la “crisis” y poder encontrar soluciones a la misma, por quien corresponda.

3.- La actitud de los llamados “políticos” que ven la misma, pero no en sus sueldos, gastos de desplazamiento, comidas, hoteles, etc., que no la notan ¡qué bueno es disponer y ordenar con el “bolsillo” de los ciudadanos!

     Para evitarnos este nerviosismo, propongo leer. ¿Y qué vamos a leer?, nos podemos preguntar: pues la forma de llegar al “GRAN JUEGO”.

     Epicuro, en QUILÓN DE LACEDEMONIO dice: “La confianza absoluta al determinar lo que es cierto y lo que es alucinatorio, es sólo posible si aprendemos a distinguir claramente entre aquéllas ideas que se basan en lo que sabemos  y hemos experimentado, y aquellas otras que tienen su origen en la imaginación y nada más. En otras palabras, si damos la misma autoridad a la imaginación y a nuestros sentimientos internos que la que damos a lo que sabemos y hemos experimentado, nunca estaremos completamente seguros respecto de nada, toda vez que no habrá un principio básico con el cual eliminar la duda y la confusión”.

     Pues bien, para aclarar la relación entre “imaginación y sentimientos” y eliminar “duda y confusión”, respecto de la “crisis”, propongo realizar el JUEGO DE LA RELAJACIÓN MENTAL, de la siguiente forma:

     Comencemos por adoptar una posición cómoda en un sillón.

     Luego cerramos nuestros ojos lentamente y tomamos conciencia en nuestros pies, los comenzamos a sentir muy pesados, tanto así que no podemos moverlos y así mismo nos dirigimos hacia la pierna derecha, la comenzamos a sentir muy pesada, tanto así que no podemos moverla, luego pasamos a la pierna izquierda, tronco, brazo izquierdo, cuello y cabeza. Zona por zona vamos tomando conciencia de cada una de ellas y cada una de ellas se hace pesada, muy pesada, tanto así que no podemos moverla.

     Después imaginamos que entramos a un edificio de siete pisos y estamos en el piso 1, por ser el piso 1 tomamos una respiración profunda, cuando observamos el piso, el techo y luego observamos figuras de color rojo, todo lo que podamos imaginar de color rojo.

     A medida que vemos objetos, animales, etc. Rojo; vamos caminando a lo largo de un pasillo rojo y al final del pasillo hay una escalera, subimos por la escalera y llegamos al piso naranja y como es el piso 2 tomamos 2 respiraciones profundas, esta vez haciendo conciencia de cómo nuestros pulmones se llenan de ese aire tan puro que respiramos.

     Aquí observamos todo anaranjado como un cesto de naranjas, el pasillo, el techo, las paredes todo es de color naranja, igualmente caminamos por este pasillo hasta las escaleras subimos y llegamos al piso 3 y por ser este piso tomamos 3 respiraciones profundas haciendo conciencia de cómo nuestros pulmones se llenan de aire tan puro y maravilloso que nos llena de energía.

     Este piso es de color amarillo, igualmente imaginamos todo amarillo, flores, el sol, arena, hojas, mangos, etc. Luego caminamos por el pasillo tomamos la escalera para llegar al piso verde que por ser el piso 4 nos corresponden cuatro respiraciones profundas; en este piso todo es verde: árboles, flores, insectos, frutas, etc.

     Luego caminamos por el pasillo, subimos por la escalera y llegamos al piso azul, como es el piso 5 serían 5 respiraciones profundas tomando conciencia de como entra el aire en los pulmones y de como lo exhalamos. Aquí vemos un cielo azul intenso, aves azules, hasta rosas azules. El siguiente piso es de color violeta con seis respiraciones, se observan orquídeas, aves violetas, etc. El último piso es el índigo (azul muy oscuro) en el cual estamos en la tranquilidad del océano, donde es de color índigo; aquí tomaríamos 7 respiraciones profundas, también tomando conciencia de la inhalación y exhalación del aire.

     En este punto  ya hemos terminado nuestra relajación, ahora comenzamos a sentir nuevamente nuestros pies, la pierna derecha, la izquierda, el tronco, el brazo derecho, el izquierdo, el cuello y la cabeza, luego abrimos nuestros ojos lentamente.

     Recuerde que debemos tomar nuestro tiempo para hacer la relajación; trata de no ser interrumpido por otras personas y el sitio donde lo realice debe ser ligeramente oscuro; al principio trata de no colocar música, pero luego cuando ya domine la técnica puede colocar una música muy suave, instrumental, si es posible donde se oigan sonidos de la naturaleza.

     Esto, aunque parezca una tontería, es una realidad. Se llama TÉCNICA DEL ARCO IRIS y dicen los especialistas que es muy buena.

     Como han observado, hemos llegado al final. Aquí abrimos los ojos… muy abiertos… observamos y vemos una imagen muy difusa en la TV –pues al relajarnos, creemos que nos hemos dormido– y escuchamos a alguien que habla y con un sonido muy lejano dice: la crisis, no existe… no sufran los pensionistas, pero continúen votándome, auto-contrólense hombres de poca fé… Dios existe y no les abandonará.

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